Encontré esta imagen aquí
¿Qué ves al mirar en el espejo? La
imagen corporal o esquema corporal consiste en el conocimiento y representación
simbólica global del propio cuerpo. Esta imagen se constituye por un componente
perceptivo (precisión con la que se percibe el tamaño, el peso y las formas),
un componente cognitivo-afectivo (sentimientos, actitudes, pensamientos que
despiertan el propio cuerpo) y un componente conductual (conductas que se
pueden derivar de los anteriores factores) que se encuentran interrelacionados
entre sí. En general, la imagen corporal coincide con la realidad. En otras
palabras, uno se ve tal como es. Claro, se puede tener una imagen corporal
negativa por baja autoestima o por presiones de la sociedad en la que vivimos. Hay
que tener en cuenta que la forma como la sociedad visualiza hoy en día la belleza
ejerce una enorme presión en la humanidad en general. Sin embargo, esta presión
es tanto mayor en las mujeres, a quienes se exige que sean de cuerpo adelgazado
y esculpido. Para lograrlo, muchas se vuelcan a dietas, programas de
ejercicios, cirugías y productos ofrecidos por laboratorios. Pero, a veces, el
precio de la delgadez se paga en términos de salud mental y es allí cuando la
imagen corporal no coincide con la realidad, es allí cuando se produce una
distorsión entre lo que se piensa que es y lo que realmente es. Es como si estas
personas se vieran en esos espejos que agrandan la figura, de esos que tanto
gusta a la gente en los parques de diversiones. Pero no es ninguna diversión para
quien sufre de una distorsión de la imagen corporal. De hecho, esta distorsión
de la imagen corporal es la que lleva a los trastornos alimentarios. ¿Qué
factores influyen en que la imagen corporal se distorsione? Las familias
excesivamente protectoras, el rechazo de los cambios físicos asociados con la
pubertad y/o la disparidad ente los valores sociales que se estimulan en la
mujer y la experiencia real. Si una persona padece de distorsión de la imagen
corporal, debe buscar la ayuda de psicólogos especializados en la materia. No
es algo que se pueda cambiar a pura fuerza de voluntad. Es algo que se debe
trabajar con profesionales capacitados. Para quienes no tienen una distorsión
de la imagen corporal, pero sí una imagen corporal negativa: procuren no
dejarse llevar por lo que la sociedad dice que es bello. La belleza viene en
diferentes tamaños, texturas, colores, aromas y sabores. La vida es bella
justamente por la variedad que ofrece, por la diversidad que nos rodea. No nos
alienemos. Resaltemos la belleza de cada persona a nuestro alrededor, aún
cuando no encaje con la moda del momento. Hagamos saber a los demás lo bellos
que son… y hagamos lo mismo con nosotros mismos.